Como ya se dijo aquí repetidamente, la posibilidad de vida inteligente en el resto del universo es materia de especulación, y el tema puede ser afrontado desde diferentes puntos de vista por charlatanes, por divulgadores escépticos o por científicos (o por otros tipos de fauna). Después de haber conversado sobre este tema he mantenido de manera inconsciente las antenas alertas hacia los comentarios de otras personas acerca del mismo. El enfoque charlatán ha sido mencionado recientemente en el blog El retorno de los Charlatanes, especialmente en la entrada “Pero ¿Hay vida extraterrestre?, y en el blog Guía de la cocina antropofágica en la entrada “Ver para creer”, cuya lectura es bastante interesante y, en ambos casos divertida.
Me encontré el enfoque desde la ciencia actual como una referencia en el blog Bad Astronomy que me pareció bastante interesante y quiero comentar en este espacio, para no quedarnos con la sensación de que el enfoque científico al asunto de la vida en el universo se limita a la ecuación de Drake y la paradoja de Fermi.
Para quienes no lo conozcan, el autor del blog Bad Astronomy es Phill Plait, un astrónomo profesional a quien le gusta escribir acerca de divulgación científica en el área de su especialidad y escepticismo con un estilo interesante y ameno. En el post de referencia, Plait explica que, como resultado de una apuesta (referente al blog que sería seleccionado como el mejor en una competencia) sostenida con otro divulgador científico a quien también le gusta bloguear, se vio obligado a escribir una entrada elogiando a la biología como ciencia (dado que su “oponente” es un biólogo). En la entrada mencionada Plait cita dos fuentes de referencia que encontró como parte de su búsqueda de información sobre el tema: la revista de Astrobiología y el documento llamado The Astrobiology Primer. Es acerca de éste último documento que quiero hacer algunos comentarios.
En los siguientes renglones quiero compartir algunas impresiones que la lectura de ese documento me dejó.
El Astrónomy Primer (The Astrobiology Primer: An Outline of General Knowledge—Version 1, 2006) es un documento educativo emitido originalmente por el Instituto de Astrobiología de la NASA (NAI) y que pretende ser una consulta de referencia para quienes estén interesados en el estado del arte (la actualidad) de las diferentes disciplinas que en forma combinada abarca el campo de la astrobiología. Estas disciplinas comprenden la astrofísica, especialmente en lo referente a las teorías más aceptadas acerca de la formación, evolución y clasificación estelar, muerte de las estrellas, el sistema solar y su formación, los planetas y su formación, los cometas y los asteroides, los impactos de cometas y asteroides con planetas, la geología y el tiempo geológico, cambio climático y evolución climática, las más tempranas evidencias de vida en nuestro mundo, ciencias de la atmósfera, planetología comparativa, astrobioquímica y los inicios de la vida, habitats para la vida primitiva, vida y evolución, dinámica evolutiva, fósiles químicos, paleontología y el impacto de posibles catástrofes en el desarrollo de la vida, detección y caracterización de planetas, criterios de habitabilidad de planetas, exploración y caracterización de Marte y Europa (el satélite joviano), diversidad de la vida, química de óxido-reducción y su importancia para la vida y la vida en condiciones extremas, así como la analogía de las condiciones extremas con posibles condiciones en otros mundos, biología espacial, planetas extrasolares, y las posibilidades de vida en diversos tipos de sistemas estelares, estado actual y proyecciones de la exploración espacial y las políticas para evitar la contaminación biológica durante la exploración espacial.
El primer no es un libro de texto, sino que pretende ser una especie de índice referente a la vasta literatura existente en la materia.
Lo interesante de esta lectura consiste en que, al ser una guía para describir el estado del arte, puede leerse como una introducción a estudios más completos, por lo que tiene un importante potencial como lectura de divulgación. Son 79 páginas, por lo que no es un documento extenso. Sin embargo en esas páginas define los conceptos, estudios actuales, debates más importantes, hipótesis y proyecciones al futuro cercano para las disciplinas revisadas. La redacción es sencilla y tiene, al final de cada capítulo un glosario de los términos relevantes para facilitar el seguimiento.
En la introducción, se indica que la Astrobiología, estudio de la vida como fenómeno planetario, pretende explicar la naturaleza fundamental de la vida en la tierra y la posibilidad de la vida en otras partes. Para esto, los astrobiólogos han establecido una comunicación sin precedentes con otras disciplinas tales como la astronomía, biología, química y geología.
A propósito de la común calificación acerca de la soberbia de las posturas científicas, cabe hacer notar que la redacción de este texto es un ejemplo de la humildad del lenguaje de la ciencia. Aquí va un párrafo:
(Referencia: Sección 4D, Eventos raros en la Evolución / Eventos catastróficos, pag 776)
<< Las catástrofes ambientales nos dan una idea de cómo el ambiente puede restringir fuertemente o influir a la evolución, aun si esto ocurre eventualmente. Quizás la catástrofe más temprana encontró por vida primitiva haya sido el así llamado período del bombardeo severo durante la acreción planetaria temprana, un período caracterizado por la alta frecuencia de impactos de asteroides de gran tamaño, que pueden haber efectivamente vaporizado y, por lo mismo, esterilizado los océanos y la capa superficial de la corteza terrestre. Este bombardeo severo se mantuvo hasta hace aproximadamente 3,900 millones de años (3.9 Ga), lo cual es de hacer notar que precedió a los más tempranos (aun en controversia) rastros de vida por algunos cientos de millones de años. Eventos de impacto más recientes han sido importantes para impulsar el cambio adaptativo o aun la extinción, tal como el caso de la extinción masiva por el imparto en Chicxulub durante el Cretacico -Terciario (ver Sec. 2B y Fig. 2.2). >>
Compárese el cuidado en el uso del lenguaje con las pruebas contundentes a que apela continuamente Jaime Maussan, y las continuas referencias a la realidad que ya está aquí y que la ciencia oficial no quiere ver.
Llama la atención desde el principio la aclaración que se hace con respecto a la terminología. Cuando en un solo tema se manejan varias disciplinas, es común que existan confusiones en cuanto al significado de diferentes términos, lo cual puede fácilmente conducir a equívocos. Un ejemplo es el uso de la palabra “terrestre”. Otra aclaración interesante es la indicación de que el término “orgánico” no es equivalente a “biológico”.
Por último, quiero mencionar que ya casi al final del texto, se mencionan los protocolos que la NASA ha establecido y revisado para evitar que las misiones espaciales se constituyan en vehículos de contaminación biológica tanto de la Tierra hacia otros ambientes como de los otros ambientes hacia la Tierra. El comentario de Phil Plait, en referencia a la exploración espacial es: cuando hayamos llegado ahí, los alienígenas seremos nosotros mismos.